Y mientras caminaba por el mismo pueblo que hace dos años y escuchaba las dos canciones que me recuerdan a ti, supe que por primera vez acepté que ya no estabas. Con los cascos a todo volumen, viendo como las demás personas me miraban mientras habrían y cerraban la boca seguramente diciendo palabras vacías que no me apetecía oír...
Quería llamarte y decirte que esto no es lo mismo sin ti, y disimularía mis sollozos entre chistes y cosas sin demasiada importancia para que no lo notaras, preocuparme por ti como hacía antes, mucho antes. Y que me cuentes como te va todo, lo poco que duermes y lo mucho que trabajas, me preguntarías como están todos y yo te mentiría diciendo que está todo tal como lo dejaste. Aunque sepa cada una de las palabras de esa conversación a mi solamente me apetecía escuchar tu voz. Y, al colgar, se me quedaría un regusto a distancia. Quería decirte que me acordé de ti en mi cumpleaños, que sigo llevando tu pulsera como tobillera por que me sigue viniendo grande. Que sigo siendo igual de pesada, y por supuesto, igual de celosa...
Vuelve pronto... por favor, lo necesito, te necesito.
No hay comentarios:
Publicar un comentario