El destino, es el suicidio.

Tenemos todo el futuro frente a nosotros, y no tenemos prisa de llegar.

Sinceramente, no se ni siquiera si estoy enamorada. Estoy ilusionada, que mierdas, estoy feliz. Estoy como una puñetera niña estrenando su piruleta que le ha costado tanto conseguir. Pero la verdad, esto ha sido fácil, creo que hasta demasiado. 
No te digo que seas necesario para mi felicidad,  pero creo que cuando estoy contigo sonrió mas.
Me encantaría tener una cámara para grabar todos estos momentos, ¡maldita sea! Tendremos que conformarnos con que se queden grabados en los arboles que nos observan, en las grabaciones de las cámaras de metro que verán desinteresados trabajadores, y las paredes de aquella habitación mohosa en la que no dormiste hasta que te diera el beso de buenas noches, prometiéndote que te despertaría con otro al amanecer.
CURSILADAS, cursiladas, y mas cursiladas...
Lo siento. Necesitaba decirlo.